Autoconvocados de Selva piden limitar a 1500 metros las fumigaciones. El ejecutivo propone 200
En una entrevista realizada con vecinos autoconvocados de la ciudad de Selva contaron sobre la discusión que se plantea en el Concejo Deliberante por las fumigaciones en campos linderos al pueblo.
La Lic. María Rosa Pereyra, la Veterinaria Lourdes Costas y María Ríos, hablaron con FM CERES 98.7 Mhz para contar sobre los proyectos que limita la fumigación en Selva, donde proponen un límite de 1500 metros contra el proyecto del poder ejecutivo local que impulsa 200 metros libres de fumigación.
Si bien, ponemos en este artículo el audio de la entrevista, las vecinas autoconvocadas nos entregaron un escrito que aquí compartimos:
SELVA LIBRE DE AGROTOXICOS.
¿Cuán cerca de los niños se permitirá rociar con agrotóxicos? ¿200, 700, 800, 1000,1200, 1500 metros?
En estos días, ha llamado la atención de la ciudadanía de Selva, un proyecto de Ordenanza presentado por el Ejecutivo Municipal, que propone sólo 200 metros libres de fumigaciones.
Tras los reclamos y preguntas de diferentes actores de la ciudad, incluidos concejales de la oposición, el Municipio aseguró que no se trata de un Proyecto cerrado sino de una propuesta base para iniciar una discusión al respecto y llegar a establecer en conjunto los límites que se crean necesarios.
Es así que los Concejales del Honorable Concejo Deliberante de Selva, integrado por quien Preside el organismo Sr. Manuel Uberti y la Concejal Sra Griselda Marozzi integrante de comisión de medio Ambiente participaron el día Jueves 23 de Mayo a una reunión abierta a la comunidad para tratar la misma. Allí, se dio intervención al Director del Hospital Dr. Facundo Nervo y a miembros del equipo de salud como la Lic. María Rosa Pereyra quienes aseguraron que los datos en salud son preocupantes, llevando un relevamiento riguroso en el seguimiento de patologías relacionadas a los problemas que ocasionan los agrotóxicos, como respiratorios, dérmicos, hormonales, oncológicos, etc. También fueron convocados los Vecinos de Ceres y de Hersilia quienes cuentan desde 2012 y 2011 con ordenanzas que alejan los agrotóxicos en 700 y 800 metros respectivamente.
Los mismos contaron como desde entonces se está trabajando desde la agroecología contando incluso ambas localidades con ordenanzas al respecto para acompañar a los productores técnicamente en sus producciones, y que lo están haciendo bajando costos y con buenos resultados.
El Presidente del Concejo dijo que querían hacerlo a conciencia y que por lo tanto no era urgente, a lo que varios presentes le dijeron que sí lo era, dado además que es un tema que viene trabajándose en la comunidad desde hace más de seis años y que era hora de que se proteja a la población de una vez por todas.
Otra ronda de consultas.
Por su parte, el Intendente de la Municipalidad junto a Concejales Oficialistas convocaron a otra rueda de consultas el día Lunes 27 de Mayo. En la misma, el Sr. Intendente ratificó que es un proyecto base para ser ampliado y modificado. Una vez más, los vecinos presentes y de instituciones educativas dejaron en claro que no aceptarían 200 metros sino que era necesario un margen de protección mayor.
La insistencia viene desde lejos.
Desde hace más de seis años los vecinos, escuelas y efectores de salud de la ciudad de Selva vienen trabajando en la conciencia ciudadana y gubernamental por el cuidado de la salud y el ambiente. En el transcurso de estos años se han proyectado películas (Desierto Verde), presentado libros (La Venganza del Amaranto de Ricardo Serruya), hecho asambleas (CIC, Club de Abuelos, donde incluso han participado anteriores Concejales y el mismo actual Intendente de la ciudad, etc), disertado médicos e incluso el Ingeniero Químico Marcos Tomasoni explicando el comportamiento de los agrotóxicos. Se han realizado relevamientos epidemiológicos desde el Hospital, se han tomado muestras del impacto de los agrotóxicos sobre la vegetación de la zona urbana, se realizó taller de b Sistematización de consultas en el Hospital sobre épocas de fumigaciones año 2017-2018 y como mantener la producción apícola dentro de la matriz agrícola.
Se trabajó en las distintas instituciones educativas con “La escuela y la educación ambiental” Película “Viaje a los pueblos Fumigados”.
Un proyecto de Ordenanza construido desde la diversidad de voces.
En noviembre de 2018, todo este trabajo previo fue coronado con 4 jornadas de arduo trabajo donde el ultimo dia se trabajó desde la mañana temprano hasta entrada ya la tarde, surgió un PROYECTO DE ORDENANZA PARTICIPATIVO Y MUY RIGUROSO, DONDE SE PROPONEN 1500 METROS LIBRES DE AGROTÓXICOS.
En la elaboración del mismo estuvieron presentes miembros de INTA Valeria Ceirano, de la UNSE con el grupo de política ambiental con Jimena Garcia Battan, representantes del municipio Yoana Borgogno Secretaria de Medio Ambiente, Maximiliano Mori Secretario de Cultura, Concejales, Autoridades del Colegio F.F. De Victoria, IFD Rene Favaloro vecinos autoconvocados, público en general El PROYECTO surgió a partir del estudio de las leyes nacionales, provinciales y diferentes ordenanzas de la región.
BASES CIENTÍFICAS Y LEGALES
Las bases para proponer 1500 metros como distancia adecuada para proteger la salud de la población provienen de: la Ley de la Provincia de San Luis que estableció esta distancia para todos sus pueblos y ciudades, a la vez, es una media entre ordenanzas que toman entre 800 y 2000 metros como son Hersilia o los 1000 del fallo de la Justicia Entrerriana o los 2000 del partido de Cañuelas entre muchísimos otros.
A la vez, se respalda en el Estudio Científico de la Universidad de Río IV que analizó el comportamiento de los agrotóxicos en personas que viven en barrio cerca de las fumigaciones.
Los estudios se realizaron en Río Cuarto, Las Vertientes, Marcos Juárez, Saira, Rodeo Viejo y Gigena. Los productos más encontrados y que provocan más daño son el glifosato, atrazina, cipermetrina, clorpirifós y endosulfan entre otros de menor cuantía. La presencia de los mismos así como el daño genético que producen, sobre todo en niños, va disminuyendo conforme las personas viven más lejos de la zona rural donde se aplican, así se pudo determinar que el daño genotóxico es fuerte en los primeros mil cincuenta metros desde donde se aplican agrotóxicos, a partir de allí comienzan a disminuir considerablemente.
El otro factor insoslayable es que, si bien se puede hacer una aplicación de venenos con todos los cuidados, lo que no se puede controlar es el clima, ni el comportamiento posterior de estos en el cultivo luego de que fueron rociados, ya que las plantas transpiran extrayendo humedad del suelo y transfiriéndola a la atmósfera. Este fenómeno ocurre día tras día, es así que el veneno (recordemos que la persistencia de estos en general supera los 100 días) alojado en las hojas es levantado en parte por esta transpiración quedando otra vez en el aire, el cual, si el viento va en dirección del pueblo, irá a sus habitantes. Al tener al menos 1000 metros de distancia, lo evaporado y trasladado por el viento tiene la distancia y el tiempo suficiente para ir tomando altura y dispersión atmosférica lo que disminuirá al mínimo la posibilidad de que los pobladores entren en contacto con esos químicos tóxicos. A la vez, las partículas tóxicas que caen en tierra y vuelan con el viento si hay buena distancia no llegarán a los hogares con su carga tóxica, o no pasaran al mapa de uso inmediato que hacen los hogares del pueblo.
Responsabilidades políticas y sociales.
Queda el desafío y la preocupación de los vecinos y las diferentes instituciones que han venido trabajando a lo largo de estos años, sobre la necesaria y urgente sanción de un ordenanza que establezca límites claros y seguros para las fumigaciones a la vez que en paralelo el Concejo Deliberante y el Municipio avancen en un proyecto que apuntale a los productores del periurbano acompañándolos en la reconversión a la agroecología. Hersilia y Ceres ya lo están haciendo junto a miles de hectáreas que se suman en toda la Argentina. No fumigar no es sinónimo de improductividad sino todo lo contrario, es la oportunidad de producir mejor, con más sanidad, mejorando la calidad de la tierra, el agua y el aire, la salud de los cultivos y las pasturas y de los animales, reduciendo costos por cortar con la dependencia de insumos externos y logrando equiparar y luego superar los rindes de las producciones convencionales.
Políticas donde ganan todos y mejora la salud, la producción y las relaciones de los diferentes actores de la ciudad.